Aprovechando que acaba de pasar Halloween y que hace tiempo que no escribo, voy a poner un fotograma con piano desvencijado (y rata). Es de la película It, basada en la famosa novela de Stephen King.

No se me ha ocurrido nada muy original para esta entrada. He pensado sobre qué ocurre con esos pianos que se quedan viejos y desafinados y la verdad es que la mayoría no merece la pena restaurarlos, porque solo pianos de marcas bien conocidas tienen valor.

Durante muchos años tener un piano en casa era una señal de status económico y sobre todo en centro-europa y en EEUU había muchos hogares con pianos verticales que han ido envejeciendo. Al parecer en 2019 es China el mercado emergente de pianos acústicos y también uno de los principales fabricantes, como consecuencia del éxito de pianistas como Lang Lang.

Con todo, hay gente que recicla estos pianos ancianos con usos muy originales. Basta buscar en Pinterest, "repurposed piano".

La película: It (2017)