He vuelto a comprar CDs. Y me parece algo muy interesante. Porque el proceso de compra es inverso al que usaba cuando era un adolescente. Te explico. Cuando era más joven, no tenía tantos recursos y aun así compraba CDs más caros que en este momento, solo porque me gustaba la portada. Lo cual no es una forma muy optima de elegir música.
¿Cual fue mi primer CD? Dangerous de Michael Jackson. Por unos 15 euros, creo recordar.
Ahora, tengo muchos más recursos y compro discos, como mucho del año pasado, que sé que van a tener un lugar seguro en mi historia musical. Seguramente los he escuchado decenas de veces en streaming y me apetece tenerlo en físico y escucharlo con la mejor calidad posible.
Comprar CDs en estos tiempos en los que están de moda los vinilos es además como si te soltaran en un centro comercial con un cheque en blanco. Las novedades son más baratas que los vinilos y hay mucha venta de segunda mano a precios irrisorios.
No te voy a intentar vender la mierda nostálgica de llegar a casa con el disco de turno para escucharlo con ilusión mientras hojeabas el booklet con las letras... no, es muy cómodo llevar toda la música del mundo en el bolsillo. Pero sí hay algunas razones lógicas, en cuanto a la calidad de la escucha y del material que se deben valorar, sobre todo para la música que ha marcado tu vida y quieres escuchar de la mejor forma posible.
Aquí va la lista:
- El sonido en un buen equipo Hi-Fi con unos monitores o cajas acústicas de calidad: esto es simplemente un placer auditivo.
- Tener capacidad de evitar las remasterizaciones si es necesario: te sacan un disco con la remasterización del 2025, por ejemplo, y a saber si te gusta más que la original con sus pequeñas imperfecciones. Y a saber si acaban por eliminar la original de tu servicio de streaming.
- Tener control sobre las re-grabaciones: Taylor ha regrabado sus primeros discos, pero no es la única, y te diré una cosa, la Taylor que grabó los discos hace años no es la misma persona, y por mucho que se esfuercen en replicar lo mismo, no tiene porque sonar igual, ni ser mejor que la versión original. Tener una copia en CD, te permite tener siempre la versión original del disco. (qué conste que Taylor Swift no está entre mis gustos, pero respect a Taylor 🙂)
- La compresión para ajustar el rango dinámico automatizada que hace que las canciones en una lista de streaming suenen igual de volumen, por ejemplo. Esto es un concepto técnico, pero el asunto es que el rango dinámico de la grabación original, solo lo escucharás con seguridad si tienes un formato físico.
- Los CDs son baratos o muy baratos en este momento. Puedes completar una pequeña colección por poco dinero.
- Ocupan menos espacio (que los vinilos). Last but not least. En las grandes ciudades tenemos un espacio limitado.
Y eso es todo. ¿último CD que he comprado? El Love Letters de Metronomy, por 2 €.